Tuesday, September 05, 2006

SER MODELO ES COSA SERIA


Si alguno de ustedes tiene una más o menos importante obsesión – adicción por las series de tv yanquies como yo, se habrá dado cuenta de que, por lo general, hay cuatro o cinco meses de receso entre el final de una temporada y el comienzo de otra. Generalmente en los finales de temporada pasan cosas increíbles (caso típico en Gilmore Girls: Lorelai se separa de Luck y se acuesta con Christopher, el padre de Rory!) y uno piensa mucho en ello los primeros días, pero luego con el tiempo se le pasa, se dedica a ver algunos capítulos viejos y casi ni piensa en lo que vendrá, hasta que en octubre empiezan a pasar las propagandas de la próxima temporada y uno empieza a ponerse cada vez más ansioso.

Pero en realidad quería hablar de algo que no es exactamente una serie, sino más bien un reallity show en el que no dejé de pensar desde que a Naima, la chica de la cresta que ganó la cuarta temporada, le mostraron su foto enorme arreglada con photoshop, indicándole de ese modo que era la acreedora de un contrato por doscientos cincuenta mil dólares con la empresa Ford Models, una campaña publicitaria con Gil Bensimon y ser la nueva cara de la línea de maquillaje Cover Girl. Khalen, la perdedora que también era hermosa, no se llevó nada, que yo sepa.


Pero la cuestión es que la quinta temporada de America’s Next Top Model (la dan todos los miércoles a las 21:00 por Sony Entertainment Televisión. Yo a esa hora tengo clase de historiografía y solo me queda verla ese mismo día a la una de la mañana o los domingos a las 12 del mediodía. En ambos horarios generalmente estoy dormida, -los miércoles porque soy ñoña y en la semana me acuesto temprano, los domingos por razones obvias- pero ahora hago el esfuerzo y religiosamente lo veo. Porque no es solo un programa. Es una religión). Y todavía no sabemos bien qué pasará con estas chicas, pero en lo que a mí respecta,

I just can’t wait.


Tenemos de todo un poco. Desde la blanquita bien estúpida (Nicole, carita de muñeca, nariz perfecta, expresión de “no me preguntes, solo soy una chica”) hasta la regordeta Kim, que es interesante y linda pero fundamentalmente gay (vieron esas personas gays que lo primero que dicen cuando uno los conoce es que son gays, aun muchísimo tiempo antes de que uno quiera saber que de hecho son gays, más gays que el resto de los gays. Y no es que tenga algo contra los gays, por favor no me malinterpreten). En el medio, hay una negra buenita (Bre), una negra medio mala que se lleva el mundo por delante (Nik), una flaca que me encanta que tiene unas cejas enormes y brazos musculosos (Corin), una gorda que nadie entiende muy bien que hace ahí porque además de ser gorda es una pésima modelo (voto porque haya un concurso de modelos gordas. Si no, se presta a que uno diga que sigue ahí solo porque es gorda y le tienen lástima, y si la sacan van a decir que la sacaron porque es gorda y las demás son flacas) y un montón de otras chicas que no llaman demasiado la atención ni creo que ganen.


Es interesantísimo ver a lo largo de cada capítulo como las chicas seenfrentanaretosdificilísimos como correr en una cinta, caminar con ojotas, maquillarse sin espejo o dejar que les corten el pelo como quieran (entiéndase: como quieran los mejores estilistas del mundo). Así, hemos visto en la temporada pasada a la pobre Lluvy, esa hermosa chica con cara de actriz de los años treinta irse porque no salió bien en una foto (que le sacaron con un short de jean y una remera rota, en una especie de potrero lleno de barro, con gomas de tractor y viento y agua cayéndole encima), o despedimos a Cassandra porque, habiéndole cortado ya su espantoso pelo eternamente castaño y lacio, le dijeron que se lo cortarían dos centímetros más y no quiso, por lo cual se fue voluntariamente.


Capítulo tras capítulo, Tyra Banks (que les lleva quince años y aún así les rompe el culo a todas) va despidiendo a las chicas que nosabenloquequieren, nosecomprometenconelmodelaje (cosa seria) o simplemente nomuestranlasuficienteenergía. Pero, enfrentémoslo. Las que hasta ahora se fueron, son las más feas. Mejor dicho, no exactamente las feas, sino esas que son demasiado flacas, buenas, inexpresivas o que no generan quilombo. Porque cuando son dos lindas las que quedan (pongamos por ejemplo el último capítulo, estaban Sarah y Kim) siempre echan a la menos problemática. Y como Kim es gay, si, ya lo sabemos, eso necesariamente generará problemas. Se puede enamorar de alguna, romper corazones o simplemente seguir expresando hora tras hora lo confundida que está acerca de quien es, y usando esas camisas con corbatita y pullover escote v (aunque se sepa que hace treinta grados porque las demás están en musculosa). Hay un par de consejos de Tyra que rescato después de todo, como eso de no hablar de tus defectos porque se notan más o si hacés una boludes, hacer como si no pasara nada.


Lamentablemente, estamos en el tercer mundo a donde todo llega con un año de atraso, y por lo tanto a través de internet ya sé quien va a ganar (era obvio) . Pero de todos modos mañana a la noche me compro un chocolate y espero con ansiedad que sea la una, preguntándome quien será la próxima víctima.

5 comments:

joAco said...

Interesante análisis. Lo he visto de vez en cuando, cuando no hay nada más en otros canales... porque la verdad, aparte de despertarme alguna risita cínica eventualmente, me dan pena las pobres estúpidas.

congratulaciones por el nuevo diseño del blog. siga mejorándolo

joAco said...

nah, me gustó el post. vivo en santiago de chile. pero soy de buenos aires.

vos de donde sos?

(por cierto, no le haga caso a la última oración de mi anterior post)

Hernan said...

ufff!!
suerte que no me enganché con niguna de esas series.

suerte que ni Mc Gyver, ni Manimal, ni Brigada A eran continuadas.

Hernan said...

Hay gente enojada por no poder dejar copmentarios sin ser blogger.
Muy enojada.

joAco said...

no me lo robé, se lo juro. o por ahí me lo robé inconscientemente.
en que parte de lost in translation hablan de eso?

visitá mi otro blog:
www.carlosalozarena.blogspot.com